17 octubre 2009

Martín Rimbombante


Si uno ve a Martín, se envuelve en colores.
Si habla Martín todo es un jolgorio.
Y si sonríe Martín….si sonríe se ilumina el mundo!

Todos creían que de tanta alegría, Martín explotaría.
Pero Martín no era un muro infranqueable.

Había cosas que lo desconsolaban.
Cuando alguien que quería lo ignoraba.
Cuado alguien que quería lo retaba.
Cuando alguien que quería no lo escuchaba.
Cuando alguien que quería mucho no lo quería a él.

¿Qué hacer?
Buscó respuestas en distintas filosofías sin comprender una sola palabra.

¿¿Dejar de querer?? Ni loco.
¿¿Dejarse de tanta hipérbole?? Por ahí va la cosa…-pensó.


1 comentario:

Anónimo dijo...

hay!!! este me gustó, no sep, siento q de alguna manera me identifica