01 abril 2012

Parisi contra Goliat

Si bien la guerra presidencial aún no se desata abiertamente, por debajo retumba el zumbido de las peleas internas de los dos ejes políticos que gobiernan el país para decidir quien va a la pelea el 2013 entre los integrantes archi-requete-contra vistos que forman parte de sus filas.
El panorama es bastante desolador para nosotros, la población votante, con ningún deseo de siquiera rayar la papeleta. Bueno, damas y caballeros, eso hasta ahora, ya que se suma a la batalla el destacado economista Franco Parisi (“el economista del pueblo”) quien se ha encargado durante todo este último tiempo de entregarnos todas las herramientas necesarias para que absolutamente nadie nos haga tontos en el amplio ámbito de las finanzas.
Franco partió en televisión con la misión de explicar en simple todo lo complejo de la economía con la que convivimos diariamente. Si uno averigua más se enterará que está a cargo de la ejecución de un programa de nivelación de estudios gratuito y online, que enseña a montar sistemas alternativos de obtención de energía, que asesora gratis a movimientos sociales y que fue uno de los pocos que auguró un excelente pronóstico económico para el país el 2012 cuando todos los especialistas en el tema hablaban de crisis y recesión. Salvo el primer punto, toda la gran parte restante de su labor social es sin fines de lucro. Sus ingresos personales vienen por otras vías.


> Franco y Goliat

Pero la batalla es desigual. En un país donde prácticamente todo está coludido, no podemos pensar que en política no es así. Todos nos damos cuenta de eso, pero hasta ahora ha sido bastante imposible doblarles la mano a esos personajes que han hecho de la política una carrera, con la cual pagan lujosas casas, autos, colegiaturas, entre otras muchas cosas más.
Tenemos estos dos gigantes conglomerados políticos que pasan del amor al odio intermitentemente según sus intereses veleidosos y con los que la gente está totalmente decepcionada. La desaprobación del actual gobierno no es inversamente proporcional a la aprobación de la oposición, como se supondría debiera ser, si no que está en una relación directa. La gente no cree en la política y esa crisis de desconfianza hacia las autoridades es la que genera el ambiente de volatilidad que viven los chilenos. Entonces, ¿cuál es la solución? Un candidato independiente. No como M.E.O, que rompió filas para “independizarse”, sino total y puramente independiente. ¿Por qué? Porque los estudios demuestran que los chilenos no creen en los partidos políticos. Y esa es una de las grandes armas con las que llega a la batalla Franco Parisi; Su autonomía política.


> El hermanito de Franco, Antonino.


La segunda gran arma de Franco es su hermano Antonino. Doctor en economía y partner incondicional de Franco en toda su labor social. Se hizo más conocido por ser el primer economista (sino el único) que aseguró que en Chile la educación SÍ podía ser gratuita y meses atrás afirmó con convicción que todas las peticiones hechas por los ayseninos podían ser realizadas porque la cantidad de dinero que se requería era un pelo de la cola en comparación con todo el excedente del presupuesto anual del país. Y así no más fue esto último.

> ¿Sin partidos políticos no se puede gobernar?

Franco y Antonino forman una dupla raramente vista. Franco se especializó en E.E.U.U y Antonino en Europa por lo que tienen una visión bastante completa de la economía mundial. Son mateos hasta decir basta y como decanos de distintas facultades de economía han realizado inmensas investigaciones y estudios. Uno de estos últimos analizó la relación entre la aprobación de leyes en el congreso y el nivel de popularidad del presidente de turno. Concluyeron que a un nivel de popularidad de aproximadamente un 50% hacia arriba, la aprobación de leyes en el congreso es expedita, sin ninguna traba ni polémicas. Por lo tanto, gobernar sin partidos es difícil pero para nada imposible.


> Hoja de ruta


Por el momento, lo primero en el camino de Franco Parisi es lograr llegar a estar en la papeleta presidencial para luego establecer propuestas de gobierno siguiendo la línea de los ideales que viene concretando con su hermano Antonino y que por favor no caiga en las garras de ninguna entidad política, que si Franco empieza a tomar vuelo, lo más probable es que estos viejos zorros dueños del congreso se lo quieran llevar a sus guaridas del terror.

Ahora bien, como chilenos no podemos dejar pasar esta gran oportunidad que el destino nos presenta. Tenemos en nuestras manos el poder de cambiar la historia política, social y económica del país. Esta vez no nos hagamos los lesos.