30 julio 2006

¿Qué es?, ¿Qué es?

Cuando somos niños el mundo nos queda grande. Pero no piensen que es por el diminuto tamaño del cual somos inevitablemente prisioneros, sino por el poco conocimiento que tenemos de las cosas y que es necesario que vayamos adquiriendo a través del tiempo, porque en el génesis de nuestra existencia poco es lo que sabemos, por lo tanto, todo nos asombra.La anécdota más masiva con la que puedo empezar mi relato es la que sin duda le pasó a todo niño de entre 2 y 8 años. ¡Si!, don Viejito Pascuero. Pucha qué linda es la navidad creyendo que va a venir un gran señor (de donde sea que fuere) con muchos regalos y los va a repartir en todo el mundo, con duendecitos de ayudantes, conduciendo un enorme trineo y, guiando a los renos, nuestro reno favorito: Rodolfo (evitaré nombres como Rudolph o Santa Claus)
Llega a tanto la sugestión que hasta juramos de rodillas que lo vimos, de una u otra forma. Yo por ejemplo, doy por sentado que vi sus botas negras entrando a mi casa por la ventana de atrás acercándose al arbolito de pascua. 100% pura imaginación. Y eso lo que me asombra de los niños, la enorme capacidad que tienen de crear nuevos mundos, sin tanto cuestionarse en el que ya están parados. Ellos creen todo lo maravilloso que uno pueda llegar a contarles con el fin de que nos dejen de molestar. Cuando niña comía espinaca y de verdad me sentía más fuerte, mi mamá feliz ya que no hacía ningún atado para comérmela.
Por otro lado me da extrañeza ver como, por ejemplo, en una librería la sección de niños tiene una enorme cantidad de colores pero el resto de las secciones no son más que libros, grandes títulos pero sin el bono extra, que es la alegría con la que los niños están ahí, gracias a lo maravillados que se encuentran ante tanto color junto. Todo lo que está destinado a los niños tiene un toque de felicidad implícita. Por eso me quedo ahí, mientras todos se ríen y los niños me miran con cara de "pobrecita-la- adolescente-que -al- parecer -no -tuvo infancia". Pero si la tuve, y la más maravillosa de todas las infancias, es sólo que…. ¡NO QUIERO CRECER!
Abogo por los niños entonces, pero no por esos que ven todo el día TV o que pasan en el computador…. Defiendo a esos que aún luchan por una infancia real-maravillosa y por que su pequeña burbuja perdure la mayor cantidad de tiempo posible.

14 julio 2006

Poco Enorme Acuarela de Debilidades

Hoy mi querido amigo músico preguntó curioso las cosas que me hacían feliz. Difícil respuesta y más en un día como este viernes, en el que no pudieron pasarme cosas más tristes. Fue algo así como un concentrado de fatalidades. Una de las cuales me dejo mal, por que dañaron mi quebradiza fortaleza. Me pasaron a llevar como quien pisa a un hormiguita, porque ¿a quién el interesa una hormiga, una simple y común hormiguita? ¿A quién le interesa la Sary?, ¿Quién es la Sary? Me sentí más pequeña de lo que ya soy. Me concebí ínfima y lo peor de todo: Tonta. Innegablemente que si YO no hubiese sido YO no me hubiese OCURRIDO lo que me OCURRIÓ. Lo más probable es que esté maximizando la situación, pero mi sensibilidad a flor de piel me imposibilita el no dañar a cada segundo mi diminuta trinchera.

¿Y que paso a la hora de responderle al chico musical? Le respondí, pues. Contesté su pregunta tan inquisidora. Le manifesté que a la hora de ser feliz no podía faltar un buen disco,un entretenido libro, alguna estupidez que arreglar, una encantadora conversación, un lindo sol en el cielo y la compañía de mi gente. Dentro de todos esos factores los que más colman mis ansias de plenitud son las personas. Pero no todas. Hay personas que aportan la misma nada al mundo.

Mi gente. Gracias a ella es que me mantengo en pie todavía. Somos todos distintos. Intereses, gustos, apreciaciones, y formas de ver la vida disímiles…. Pero hay algo que nos une…. Y es algo aparte de la obvia afinidad… Son esas ganas de preocuparnos de las cosas que efectivamente trascienden… esas cosas que son invisibles a los ojos….pero que son capaces de hacernos despertar sonrientes y decir que los que se cansen de dar un paso no seremos nosotros.
“No queremos pasar la vida sin que la vida pase a través de nosotros…”